LA PROGRAMACIÓN NEUROLINGÜÍSTICA EN LA SALUD ORGANIZACIONAL

Me atrevería a asegurar que cuando una organización, sea esta con fines o sin fines de lucro está marchando en armonía con su propósito o Razón de Ser, es porque las personas, en su mayoría están actuando e interactuando los unos con los otros en sintonía con sus intereses personales, sus estilos de personalidad, sus capacidades, sus creencias, en otras palabras se sienten bien haciendo lo que hacen, se sienten bien en sus relaciones con los otros, se consideran atendidos, entendidos y bien tratados por sus superiores, compañeros y sus supervisados. Y es que no importa como queramos definir a una organización, siempre vamos a coincidir en que se trata de un grupo de personas que interactúan para llevar adelante un propósito. De manera que es una fórmula sencilla: Organización es igual a Gente y Gente es igual a Relaciones. Organización = Gente = Relaciones.
No creo que esté diciendo nada nuevo con esto, sin embargo es importante destacar que a pesar que esta fórmula luce muy real y que muchas organizaciones permanecen predicando que lo más importante es su gente, suelen descuidar elementos muy importantes sobre los aspectos motivacionales, caracteres de personalidad, diferencias individuales y muchos aspectos que pueden ser invalorables para obtener el mejor provecho de la gente y desarrollar en consecuencia organizaciones “sanas” y bien alineadas.

Del abordaje individual a la salud organizacional.
Visto de esta manera, luce razonable pensar que en función de lo bien que se sientan las personas en las empresas, los logros y objetivos que éstas se tracen tendrán una mayor probabilidad de éxito. En este sentido bien vale la pena trasladar a las organizaciones modelos que han nacido específicamente con la intención de ayudar a los seres humanos en el manejo de sus emociones y las de los otros, a mejorar sus relaciones, a desarrollar y potenciar habilidades y competencias, entre otras. Uno de esos modelos, el cual considero puede ser de gran utilidad es el que nos ofrece la Programación Neurolingüística (PNL), partiendo de algunos de sus postulados o presuposiciones y extrayendo por lo menos dos elementos como son la importancia de ampliar nuestra agudeza perceptiva y la comprensión de los otros en aras de fortalecer y hacer más funcionales las redes sociales y obtener de todos y de cada uno lo mejor.

Los Postulados de la PNL
Siempre pensando en la organización como una suma de personas, vamos a citar y a tratar de explicar de la manera más sencilla posible aquellas presuposiciones de la PNL que el sólo considerarlas puede resultar muy útil para entender, ayudar y sacar provecho de la gente:
El mapa no es el territorio: La esencia de este postulado es que los seres humanos somos diferentes. Por lo tanto percibimos y reaccionamos ante los hechos y las personas de acuerdo al significado que desde nuestra experiencia de vida damos a los eventos y situaciones que encontramos en el camino. Entendiendo esta idea nos lleva también a entender y aceptar diferencias individuales y hasta aprovecharlas según el contexto donde estemos.
Las personas actúan perfectamente: En vez de pensar que los seres humanos son defectuosos porque no hacen lo que parece adecuado, convencional o efectivo, es aconsejable pensar que son extremadamente eficaces para conseguir determinados resultados, aunque estos quizás no sean lo mejor para las circunstancias.
Si algo es posible para una persona, lo es también para los demás: Salvando las consecuencias de limitaciones físicas o biológicas, podemos aprender y ayudar a otros a desarrollar y potenciar habilidades, modelando y tomando de otras personas sus estrategias y formas de actuar.
Todas las personas tienen todos los recursos que necesitan: Las personas tienen dentro de si mismas una gran reserva de habilidades y atributos. El hecho de que algunos recursos no se usen o se usen muy raras veces, no significa que no se poseen, de manera que lo que ha de hacerse es ayudar a las personas a encontrar y utilizar sus recursos.
No hay fallos, solamente información acerca de los resultados: Si no se consigue el objetivo buscado, esto se puede utilizar como una información útil que sirva de ayuda en futuros intentos, en vez de tomarlo como una evidencia de la propia incapacidad para conseguir lo que se desea.
Si lo que hace no funciona intente hacer algo diferente: La flexibilidad es una clave para la efectividad. Si se modifica la forma de hacer las cosas hasta obtener un resultado esperado, será mas probable conseguirlo que si se persiste en mantener una conducta que no permite llegar al objetivo deseado.

Agudizando nuestra percepción:
Normalmente encontramos personas con las cuales en un primer contacto surge una especie de simpatía o “química” que va a permitir que se inicien y se mantengan relaciones productivas, bien sean por actividades sociales o laborales. Por supuesto también se da al contrario, donde sin saber porqué evitamos relacionarnos con otras personas que nos resultan hasta desagradables. Esa “química” o desagrado normalmente se da porque hay coincidencias que nos asemejan o diferencias importantes que conscientemente no sabemos percibir. De ahí que la PNL promueva y nos de herramientas para aprender a percibir muchos detalles en la interacción con otras personas que luego podemos utilizar para de una manera entrar en “su mapa del mundo”.
En este sentido nos resalta la importancia de prestarle atención consciente a aspectos que van desde posturas corporales, su manera de expresarse, hasta sus cambios de coloración de la piel.

Otros dos aspectos a prestarle atención conscientemente son los llamados Sistemas de Representación y los Metaprogramas.
La PNL nos resalta que hay tres grandes sistemas de cómo las personas procesamos la información que percibimos del entorno, que son el Visual, el Auditivo y el Kinestésico, y que algunos tendemos a dar más uso a uno de esos sistemas en particular. Detectar ese sistema predominante suele ser muy efectivo para hacer sintonía con el otro. Por otra parte, hay aspectos como los estilos de interacción y motivación que engloba la PNL con el término de Metaprogramas, para explicar como las personas tenemos unos programas internos o rutinas que usamos para decidir a qué prestamos especial atención y hacia donde se dirigen nuestras preferencias, en qué ponemos interés, qué conclusiones sacamos de nuestras experiencias y en qué dirección nos conducen éstas. Así podemos por ejemplo entender que mientras unos se mueven hacia lo positivo, otros se mueven para evitar lo negativo. Algunos se motivan por las posibilidades y otros por la necesidad, algunos se sienten muy cómodos trabajando en equipo, mientras otros prefieren trabajar solos. Y así muchos otros metaprogramas que al poder identificarlos nos van a servir para motivar y alcanzar de los demás y de nosotros mismos una mayor efectividad.

La importancia del Lenguaje
El lenguaje es el medio que utilizamos como sistema representacional de nuestra experiencia, de nuestro “mapa del mundo”, por lo tanto, lo que expresamos es procesado primero por un filtro que va de un contenido que se encuentra en la llamada estructura profunda, que es la representación lingüística completa de la experiencia de una persona, para luego transformarla en una estructura superficial la cual se va a expresar a través de tres grandes modalidades que son: generalización, eliminación y distorsión. Siendo que en la generalización, algunos elementos del modelo de la persona se desprenden de la experiencia original y llegan a representar la categoría total. Así por ejemplo, un problema con una persona de un departamento puede expresarse como “la gente de Contabilidad no quiere darnos apoyo”. O en las eliminaciones, donde prestamos atención de forma selectiva a ciertas dimensiones de nuestra experiencia, al tiempo que excluimos otras. Por ejemplo afirmamos que viene un cambio organizacional, pero no expresamos quién lo dijo ni cuál es el cambio. Por último las distorsiones expresando cambios en nuestra experiencia de los datos sensoriales que percibimos, por ejemplo con expresiones como “ese cliente me hace enfadar” dejando a un lado que es la persona la que se enfada y sin precisar cómo es que lo que hace el cliente genera en él tal enfado.
Ante esta transformación que damos a lo que expresamos, muchas veces es necesario precisar y llevar a la persona a conectarse con su experiencia real que viene derivada de su estructura profunda. Para ello la PNL, ha desarrollado el llamado Metamodelo del Lenguaje que proporciona técnicas interrogativas para especificar en las generalizaciones, completar en las eliminaciones y clarificar en la distorsiones, para acceder a la estructura profunda del sujeto a fin de identificar y eliminar la raíz de los problemas.

Son muchas y variadas las alternativas y técnicas que nos proporciona la Programación Neurolingüística que bien pueden ser utilizadas en el medio organizacional, pero al menos con los aspectos aquí resaltados se puede intervenir de manera individual y colectiva buscando lo mejor de las personas en un ambiente de armonía, respeto y comprensión de los unos por los otros.

Gerardo J. Velásquez D.